Naci en Rep.Dom mi madre emigro Alemania y desde adolescente, vivi el racismo en primera persona.
Ser negra para mi era sinónimo, de culpabilidad, verguenza, humillación, pánico. Durante un tiempo me refugie a la idea de ser monja, para mi era la única forma de escapar a tanto rechazo. !sorpresa! El amor llego a mi vida. Mi prioridad en ese momento era, llegar virgen al matrimonio y formar una familia… Cuando todo era perfecto… la vida volvió a sorprenderme enfrentándome a una infidelidad del hombre que creía perfecto.
En ese momento de dolor, que pensaba que la vida se terminaba para mi.
Encontré en mi camino un ángel, que me hizo renacer entre mi cenizas, me enseñó a vivir sin culpas, amarme y respetarme como soy imperfecta.
Aprendí a descubrirme como mujer y darme cuenta que estaba siendo egoísta, por que no quería casarme , que me estaba refugiando en un hombre, para no enfrentarme a la vida sola, tenía miedo que se me pasará el arroz y me quedará solterona. Mis creencias era que la mujer tenía que tener marido e hijos, para ser aceptada en la sociedad.
Hoy soy Una mujer orgullosa de su origen,libre emocionalmente, independiente, que disfruta al máximo cada momento de su vida siempre confiando en él amor